¿Cómo hacer un Gin Tonic?
Ingredientes:
- 50 ml de ginebra.
- 200 ml de tónica.
- Hielo.
- 1 rodaja de lima o de limón.
- Ingredientes botánicos al gusto (bayas de enebro, cardamomo, anís estrellado...)
Utensilios:
- Cuchara mezcladora o cucharilla imperial.
- Medidor o Jigger.
- Copa de balón.
Desde hace un tiempo, preparar un Gin Tonic se ha convertido en todo un arte, debido a la comercialización de muchos tipos de tónica diferentes, con sabores que van de lo cítrico a lo herbal. Esto, unido a la moda de ofrecer una amplia variedad de botánicos que añadir a la ginebra, ha convertido a este cóctel en una mezcla casi científica de ingredientes.
El Gin Tonic es en realidad una mezcla muy sencilla, ya que se trata de mezclar ginebra con tónica y, según se cuenta, el origen de este combinado se halla en los años del colonialismo inglés. Las tropas imperiales, repartidas por África y la India, solían sufrir malaria a causa de las picaduras de los mosquitos.
Para combatir los efectos de esta enfermedad incurable, los médicos británicos recetaban tomar tónica. Fue entonces, cuando los oficiales y soldados empezaron a mezclar la tónica con ginebra y zumo de limón para rebajar el gusto amargo de la bebida. Además, en muchos casos se añadía hielo para refrescarla y combatir el calor.
De todos los ingredientes con qué mezclar ginebra, la tónica es quizá la más versátil, ya que su sabor amargo, pero neutro, permite añadir una gran variedad de especias para Gin Tonic, como el enebro o el cardamomo, que permiten resaltar el sabor de las mejores ginebras.
En este sentido, uno de los grandes secretos para preparar un buen Gin Tonic es la temperatura de los ingredientes. Más allá de escoger tónicas con sabores o ingredientes herbales exóticos, lo más importante es que tanto la ginebra como la tónica estén bien frías. En este sentido, la tónica debe estar a una temperatura por debajo de los -5 ºC y la ginebra entre los -10 ºC y los -15 ºC.
Para preparar un buen Gin Tonic, se debe contar con una copa de balón bien fría. En caso de no tener una copa fría, puedes echar el hielo en ella y remover con una cuchara de mezclas o una cucharilla imperial (de las que tienen el mango muy largo), hasta que las paredes de la copa se escarchen.
A continuación, debes añadir una quinta parte de ginebra y cuatro quintas partes de tónica. Para las medidas, lo más recomendable es utilizar un medidor o jigger. Una vez todos los ingredientes están en la copa, remueve un par de veces, con dos golpes secos de la cucharilla imperial. No te pases a la hora de remover, ya que solo queremos mezclar la ginebra y no agitar todo. Añade los ingredientes herbales, decora con una rodaja de limón y disfruta.
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